Sri Lanka
27.10.03
Intervenciones urgentes

Sri Lanka: liberación de Michael Anthony Fernando, víctima de tortura

Caso LKA 180203.2
Detención arbitraria / Tortura / Liberación

El Secretariado Internacional de la OMCT ha recibido nueva información con respecto a la siguiente situación en Sri Lanka.

Nueva información

El Secretariado Internacional de la OMCT ha sido informado por Asian Human Rights Commission (AHRC), miembro de la Red de la OMCT, de la liberación del sindicalista y víctima de tortura Michael Anthony Fernando, en Sri Lanka.

De acuerdo con la información recibida, el 17 de Octubre de 2003, Michael Anthony Fernando fue liberado de prisión. El Sr. Fernando había recibido una sentencia a un año de prisión por desacato a la corte el 6 de febrero de 2003, luego de un juicio injusto ante la Corte Suprema. Fue sometido a severa tortura y abuso durante su detención.

Nota

El Secretariado Internacional de la OMCT saluda la liberación del Sr. Fernando y desea agradecer a todas las personas e instituciones que intervinieron en su favor y contribuyeron a su liberación.

Breve recordatorio de la situación

De acuerdo con la información recibida, el Sr. Fernando el Sr. Fernando cursó una demanda ante el Tribunal Supremo de Sri Lanka a propósito de la aplicación de los derechos humanos fundamentales. El 6 de febrero de 2003, el Tribunal Supremo, según se ha informado, le acusó de desacato a la autoridad del tribunal y le condenó a un año de prisión, tras un juicio injusto, como lo afirman las fuentes de la OMCT. La sentencia del Tribunal Supremo causó preocupación y protesta puesto que la Presidenta del Tribunal Supremo, Sarath N. Silva, contra la cual se dirigía la solicitud inicial, fue quien dictó esta sentencia. Casos como este suelen ser presididos por un juez diferente de aquel contra el cual se dirige la solicitud. Además, la norma procesal que consiste en darle tiempo al acusado para obtener consejos y representación legales no se ha respetado y el Sr. Fernando no tuvo el derecho de apelar.

Luego de esto habría sido asaltado y torturado por miembros de la policía, lo que resultó en serias lesiones en la columna vertebral. A la familia y a los miembros de la comunidad religiosa se les ha negado acceso adecuado a él en el hospital. El Sr. Fernando estaba inicialmente detenido en el hospital de la prisión debido a un ataque de asma. El 10 de febrero de 2003, supuestamente se cayó de la cama debido al dolor que sentía y se lesionó la espalda, haciéndosele difícil caminar. Los guardias de la prisión no habrían creído que se lesionó solo y lo dieron de alta del hospital con el fin de regresarlo a la prisión. Los guardias de la prisión lo habrían llevado del hospital a un vehículo de la policía y fue atacado delante de su padre por un official en ropa de civil fuera del hospital. De acuerdo con la información recibida, el Sr. Fernando fue pateado y abofeteado varias veces. Se reporta que fue forzado a entrar a la van de la policía y fue pateado varias veces en la espalda por un oficial que usaba botas.

El Sr. Fernando fue luego llevado de vuelta a la prisión, y fue otra vez atacado al punto de no poder mantenerse en pie. Se le habría dicho que se levante, y cuando no pudo hacerlo, los guardias lo trajeron a la prisión en una camilla. Lo habrían dejado al lado de un baño de olor nauseabundo y le habrían dicho que si no podía levantarse, iba a tener que quedarse allí. El Sr. Fernando fue obligado a quedarse al lado del baño durante dos días.

Se reporta que el Sr. Fernando no podía levantarse a orinar y cuando pedía ayuda, le era negada, ya que las autoridades de la prisión continuaban alegando que estaba mintiendo en cuanto a la seriedad de sus lesiones. Sin ninguna asistencia, el Sr. Fernando no tuvo otra opción que evacuar mientras estaba echado en el piso. Un poco después, un oficial de la prisión le habría quitado toda la ropa y le habría dicho que tendría que levantarse para poder recuperarlas. El Sr. Fernando pasó otras 24 horas echado al lado del baño sin ninguna ropa. De acuerdo con la información recibida, fue sólo cuando el Sr. Fernando empezó a mostrar sangre en la orina que las autoridades de la prisión comenzaron a tomar en serio sus lesiones y lo llevaron de vuelta a la unidad de cuidados intensivos en el hospital el 17 de febrero de 2003.

Ginebra, 21 de octubre de 2003