Guatemala
17.07.07
Intervenciones urgentes

Publicación del Informe Anual 2006 del Observatorio: Una perspectiva guatemalteca

Ginebra-Guatemala-París, 17 de julio de 2007. La Organización Mundial Contra la Tortura (OMCT) y la Federación Internacional para los Derechos Humanos (FIDH), en el marco de su programa conjunto, el Observatorio para la Protección de los Defensores de Derechos Humanos, el Movimiento Nacional por los Derechos Humanos (MNDH), el Centro para la Acción Legal en Derechos Humanos (CALDH) y la Comisión de Derechos Humanos de Guatemala (CDHG) se congratulan por la publicación del Informe Anual 2006 del Observatorio para la Protección de los Defensores de Derechos Humanos.

El informe anual 2006 del Observatorio para la Protección de los Defensores de Derechos Humanos recopila los casos de más de 1,300 defensores que han sido objeto de represión, así como los obstáculos al ejercicio de la libertad de asociación, que se han afrontado en cerca de 90 países. Esta nueva edición, que coincide con los 10 años de existencia del Observatorio, rinde homenaje a estas mujeres y estos hombres que cada día, y frecuentemente poniendo en peligro sus vidas, luchan para que finalmente el derecho prime sobre lo arbitrario.

En 2006, la defensa de los derechos humanos continuó siendo una actividad de alto riesgo en América Latina, el objetivo de los autores de los actos de intimidación y de las agresiones contra los defensores es claro: crear un clima de temor destinado a desalentarlos a continuar con sus actividades. En efecto, aquellas y aquellos que persisten en promover y proteger los derechos humanos siguieron siendo víctimas de múltiples actos de intimidación: asesinatos, desapariciones forzadas, actos de tortura, ataques y amenazas de muerte, actos de hostigamiento y de vigilancia, así como campañas de difamación.

Asimismo, las autoridades han instrumentalizado cada vez más el sistema jurídico con el fin de sancionar la actividad de los defensores, quienes son objeto de acciones judiciales, arrestos o detenciones fundadas generalmente en pruebas completamente fabricadas. En ocasiones se han introducido o adoptado nuevas leyes destinadas a restringir la libertad de asociación, creando en consecuencia un clima hostil a las actividades de defensa de los derechos humanos. Por otra parte, con raras excepciones, la impunidad sigue siendo la regla general en materia de persecución de los autores de violaciones cometidas contra los defensores de derechos humanos. Finalmente, las medidas de protección otorgadas por ciertos gobiernos resultaron casi siempre superficiales, constituyendo una coartada que impidió examinar las verdaderas causas de las agresiones contra los defensores y el problema crucial de la lucha contra la impunidad.

En Guatemala, las agresiones contra los defensores aumentaron aun más en 2006: así, la Unidad de Protección de defensores y defensoras de derechos humanos del Movimiento Nacional por los Derechos Humanos (MNDH) registró 278 casos de amenazas o ataques contra defensores de derechos humanos entre enero y diciembre de 2006, contra 224 en 2005. Este incremento se debe reinterpretar en el marco de las solicitudes de órdenes de captura internacional con fines de extradición efectuadas por la justicia española, en julio de 2006, contra los principales responsables del genocidio guatemalteco, las que pusieron en evidencia la lentitud y el bloqueo de la justicia nacional que, en el caso de la denuncia por genocidio, continúa en fase de investigación desde hace varios años. En consecuencia, los defensores que han contribuido a evidenciar estas deficiencias y a solicitar las extradiciones fueron particularmente atacados. Un incremento de las amenazas también fue dirigido contra los profesionales que realizan exhumaciones de fosas comunes de las víctimas del régimen militar en los años 1980.

Por otra parte, en tanto que los defensores de derechos económicos, sociales y culturales desempeñan un papel esencial, no solamente en la promoción de estos derechos, sino también, y muy especialmente, en la búsqueda de una mejor repartición de las riquezas, del respeto a los derechos laborales, del derecho a la tierra, del derecho a un ambiente sano y el buen uso de los recursos naturales, y de una verdadera igualdad para todos, son objeto de una represión creciente, llevada a cabo especialmente por parte de intereses privados a los cuales se oponen. Particularmente, en Guatemala, los dirigentes sindicales también fueron objetivo de actos violentos. Según el MNDH, el 15,5% de los defensores guatemaltecos que han sido víctimas de amenazas o de agresiones entre enero y diciembre de 2006, eran sindicalistas (43 casos censados) y el 14% eran dirigentes campesinos (40 casos).

Para los defensores y defensoras de derechos humanos en Guatemala es importante la publicación de estos informes, que reflejan en una situación mundial, lo que diariamente enfrentamos en nuestro país. En los primeros seis meses de 2007 llevamos registrados 136 ataques contra defensores, habiéndose incrementado los allanamientos a oficinas de organizaciones nacionales e internacionales. Asimismo, es importante señalar que los defensores más atacados siguen siendo los defensores de DESC, especialmente quienes se oponen a la aplicación de políticas neoliberales (tratados de libre comercio, afectación del medio ambiente por la construcción de hidroeléctricas, explotación minera, entre otros) y los defensores del derecho a la memoria, la verdad y la justicia.

En septiembre de este año, los guatemaltecos y guatemaltecas tendrán elecciones generales, lo que ha significado un incremento de la violencia común y la violencia política, afectando no sólo a quienes participan en la contienda electoral, sino también a los defensores y defensoras, lo que se evidencia en el incremento de ataques.

Este informe está disponible en los sitios web de la OMCT y de la FIDH en los siguientes enlaces:

/files/2007/03/3996/observatoire_rapport_annuel2006_esp.pdf?PHPSESSID=071f531629a00cf554d22fc71455f6d6

http://www.fidh.org/IMG/pdf/LIVRE_ESP_PDF_BD.pdf

Para mayor información favor comunicarse con:

  • MNDH: Ruth del Valle: ruthdelvalle@gmail.com, + 502 52035787
  • CALDH: Edda Gaviola: direccion@caldh.org
  • CDHG: José Alberto Flores: cdhg@intelnett.com
  • OMCT: Delphine Reculeau: dr@omct.org; + 41 22 809 49 39
  • FIDH: Gaël Grilhot: ggrilhot@fidh.org; + 33 1 43 55 25 18