Burundi
28.06.24
Declaraciones

Burundi: Nueva condena de la ONU por actos de tortura

El CAT determinó que agentes estatales torturaron a Epitace Nshimirimana, golpeándolo con hierros de hormigón y apuñalándolo en los dedos de los pies ©Shutterstock

Ginebra, 28 junio 2024 - El Comité de las Naciones Unidas contra la Tortura (CAT) ha emitido una nueva decisión condenando a Burundi por actos de tortura. La víctima, Epitace Nshimirimana, ciudadano burundés y miembro del partido de la oposición Mouvement pour la Solidarité et la Démocratie (MSD), fue detenido el 12 de mayo de 2015 por miembros de la guardia presidencial, y después recluido y torturado por agentes del servicio de inteligencia (SNR) mientras participaba en manifestaciones pacíficas en 2015 contra el tercer mandato ilegal del ex presidente Pierre Nkurunziza.

El CAT estableció que, durante un mes, los agentes estatales torturaron, privaron de cuidados y mantuvieron detenido a Epitace Nshimirimana en condiciones insalubres. Le golpearon repetidamente con hierros de cemento y garrotes, con palos y cañones de pistola, lo patearon y le apuñalaron en los dedos de los pies.

Casi 10 años después de los hechos, la histórica decisión del Comité reconoce que los servicios de inteligencia burundeses torturan intencionadamente a los opositores políticos para castigarlos e intimidarlos. También señala que la justicia burundesa no investiga para encontrar a los culpables y castigarlos, ni siquiera cuando las víctimas comparecen ante los jueces con signos visibles de tortura.

Desde la crisis de 2015, el Estado burundés sigue sin adoptar todas las medidas legislativas, administrativas y judiciales eficaces para impedir todo acto de tortura y malos tratos, especialmente en los servicios de inteligencia. Desde la llegada al poder de Evariste Ndayishimiye, en junio de 2020, han continuado la tortura y las violaciones del derecho a la vida, principalmente en forma de ejecuciones extrajudiciales y desapariciones forzadas. El descubrimiento recurrente de cadáveres en diversos lugares, enterrados precipitadamente sin investigación previa, atestigua la presunta complicidad de las autoridades con los criminales.

Para Epitace Nshimirimana, la decisión del Comité representa una victoria para el reconocimiento de su condición de víctima y de su derecho a obtener reparación. Esta decisión también valida la labor del Sr. Armel Niyongere, apoyado por los abogados del grupo de intervención judicial de la red SOS-Tortura en África, que desde hace cinco años colaboran para que los Estados del continente reconozcan su responsabilidad en virtud de la Convención contra la Tortura y luchen contra la impunidad de los actos de tortura y malos tratos.

Para obtener más información, comuníquese con: Francesca Pezzola, Directora de Comunicaciones de la OMCT, fpe@omct.org